Ejemplo de autorización para la realización de fotografías

Isis Cervera

Dentro de los derechos de imagen, no es lo mismo un contrato de cesión de derechos de imagen que una autorización para la realización de fotografías. El primero se trata de un contrato, por lo que se establece un vínculo entre la persona que autoriza y la tercera persona, por la que ambas partes han de cumplir dicho contrato. En el caso de la autorización no se establece una vinculación contractual, por lo que no hay ni derechos ni obligación entre ambas partes, simplemente se trata de una autorización de derechos de imagen. Es muy utilizada en los Colegios e Universidades en las que el consentimiento para la toma de imágenes de menores son necesarios. No obstante, podemos requerir una cesión gratuita de derecho de imagen a cualquier persona. Puesto que pueden surgir dudas entre los diferentes tipos de cesiones es recomendable que consultes diferentes ejemplos, así como un ejemplo de cesión de imagen para la realización de fotografías.

Información sobre la autorización de cesión de imagen para fotografías

Al tratarse de una autorización de cesión de imagen y no de un contrato en si, no se da la negociación de los términos. Esto es debido a la declaración unidireccional, por lo que se da la cesión de imagen en el sentido más amplio. Además, al no existir esta negociación, la cesión tiene lugar de manera gratuita, por lo que no se recibe ningún tipo de remuneración.

Además, hay que tener en cuenta que en este ejemplo de autorización para realizar fotografías se autoriza eso, la realización de las fotografías, no su posterior uso. Para ello se tendrá que realizar otro tipo de documento, a no ser que venga dado en la primera autorización. El fotógrafo/a podrá utilizar el trabajo en en su porfolio o para su propia promoción, pero no utilizar las imágenes con fines comerciales.


Por otro lado, si la persona fotografiada se trata de un menor de edad, el que aporte sus datos y realice la cesión de imagen deberá ser el padre/madre o tutor en su nombre.

Por todo esto, es conveniente que, si conoces a la persona que va a tomar las fotografías, le consultes primero antes de prestar el consentimiento para que un tercero utilice tu imagen.

 

 

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