La diástole es una figura literaria que consiste en atrasar el acento de una sílaba a la siguiente, se trata de un recurso poético que afecta a la pronunciación de las palabras. Se suele utilizar para alargar el sonido de ciertas palabras y así conseguir que los versos sean rítmicos.
Para entender mejor el concepto utilizaremos diferentes ejemplos de diástole y se comprenderá mejor en qué consiste.
La diástole, también conocida como éctasis, se empleaba originariamente en el idioma latín, donde una sílaba breve se pronunciaba como si fuera larga. En la lengua española este recurso es posible porque no existe cantidad vocálica y por eso se puede aplicar en la acentuación de la palabra.
Al tratarse de una figura retórica que afecta a la sonoridad forma parte de los metaplasmos. Otras figuras que forman parte de este grupo son por ejemplo los apócopes. El metaplasmo opuesto a la diástole es el ejemplo de sístole (convierte una sílaba larga en corta).
El nombre de diástole y sístole proviene de los elementos que forman parte del corazón, la sístole consiste en la contracción del ventrículo mientras que la diástole es cuando el corazón se relaja. Como vemos tiene un símil con la contracción y la extensión de las palabras.
Ejemplos de diástole o éctasis
Para ilustrar mejor esta figura literaria utilizaremos diferentes ejemplos que incluyen diástole.
Esta rima es de Luis de Góngora:
El conde mi Señor se va a Napoles
Y el Duque mi Señor se va a Francía
Majestades, merced, porque este día
Pesadumbre daré a unos caracoles.
Pero también podemos observar ejemplos de diástole en la actualidad. Por ejemplo en las canciones que escuchamos todos los días como el caso de Mago de Oz con "La Rosa de los Vientos". En la palabra "siembras" se alarga la pronunciación como si fuera "siembrás"
Si siembras una ilusión
Y la riegas con tu amor
Y el agua de la constancia
Brotará en ti una flor
Y su aroma y su calor
Te arroparán cuando algo vaya mal