Ejemplos de fábulas cortas

Desiree Puchades

Existen múltiples tipos de géneros literarios que poseen un determinado objetivo, y se centran en un público concreto. En este artículo repasamos qué son las fábulas cortas, a quiénes están dirigidas, su finalidad, los ejemplos más claros de este tipo de textos y sus características principales.

¿Qué es una fábula?

Cuando hablamos de una fábula nos referimos a un relato basado en la ficción y que pretende enseñar algún tipo de lección o moraleja. Se comenzó a usar la palabra “fábula” en mundo anglo franco del siglo XIV. Este término se deriva del latín fíbula que significa historia, cuento o relato y viene de la palabra fari que significa hablar. Los trovadores, los músicos o los poetas medievales de la época transmitían así historias a la gente de forma oral. Estas nacen como crítica a ciertos comportamientos y actitudes de las personas.

Características de una fábula corta

A continuación te mostramos como la mayoría de fábulas presentan un formato o modelo común bajo una serie de premisas. Estas son las características de una fábula corta:

  • Suelen estar escritas en verso o prosa y su extensión es muy breve. En ocasiones puede encontrarse escritas como una composición poética.
  • La principal característica de las fábulas cortas es que poseen una voluntad didáctica. Es decir que en la conclusión se extrae de forma simple una moraleja o lección, se puede afirmar que todos los ejemplos de fábulas cortas muestran una doble intención. La primera es que entretienen y por otro lado son un referente a la hora de aprender lecciones sobre la vida.
  • Los personajes suelen ser animales o seres inanimados. También es posible que en el relato aparecen hombres, dioses y menciones a la naturaleza.
  • La historia es contada por un narrador que no participa en la historia y es un mero observador.
  • La estructura es sencilla, se hace una presentación, se plantea un problema y suele tener un desenlace que muestra una solución.
  • La temática de este tipo de narraciones suele centrarse en el amor, el miedo, el poder, la muerte, la debilidad, la justicia y muchas más virtudes de las personas así como defectos que pueden mejorarse.
  • Los ejemplos de fábulas cortas están dirigidos a los niños para que aprendan una lección sobre un tema en concreto, pero sus mensajes y moralejas se pueden adaptar a cualquier tipo de público.
  • Suelen emplear recursos literarios que hacen referencia al humor, se usan sátiras para criticar ciertos comportamientos, recurren a la humanización y personificación de objetos y elementos no humanos.

Ejemplos de fábulas cortas

Si quieres hacer uso de este género literario, son muchos los ejemplos de fábulas cortas que puedes leer y contar a tus hijos, los más populares son los siguientes:

  • La hormiga y la cigarra


La cigarra era feliz disfrutando del verano: El sol brillaba, las flores desprendían su aroma...y la cigarra cantaba y cantaba. Mientras tanto su amiga y vecina, una pequeña hormiga, pasaba el día entero trabajando, recogiendo alimentos.
- ¡Amiga hormiga! ¿No te cansas de tanto trabajar? Descansa un rato conmigo mientras canto algo para ti. – Le decía la cigarra a la hormiga.
- Mejor harías en recoger provisiones para el invierno y dejarte de tanta holgazanería – le respondía la hormiga, mientras transportaba el grano, atareada.
La cigarra se reía y seguía cantando sin hacer caso a su amiga.
Hasta que un día, al despertarse, sintió el frío intenso del invierno. Los árboles se habían quedado sin hojas y del cielo caían copos de nieve, mientras la cigarra vagaba por campo, helada y hambrienta. Vio a lo lejos la casa de su vecina la hormiga, y se acercó a pedirle ayuda.
- Amiga hormiga, tengo frío y hambre, ¿no me darías algo de comer? Tú tienes mucha comida y una casa caliente, mientras que yo no tengo nada.
La hormiga entreabrió la puerta de su casa y le dijo a la cigarra.
- Dime amiga cigarra, ¿qué hacías tú mientras yo madrugaba para trabajar? ¿Qué hacías mientras yo cargaba con granos de trigo de acá para allá?
- Cantaba y cantaba bajo el sol- contestó la cigarra.
- ¿Eso hacías? Pues si cantabas en el verano, ahora baila durante el invierno-
Y le cerró la puerta, dejando fuera a la cigarra, que había aprendido la lección.
Moraleja: Quien quiere pasar bien el invierno además de divertirse debe trabajar y prepararse para las malas épocas.

  • La Liebre y la Tortuga
  • La Gallina de los huevos de oro
  • El Cazador y el pescador
  • El cuervo y el zorro por Samaniego
  • El águila y la flecha

¿Conoces alguna otra fábula esencial para enseñar a los niños?

  • ¿Te ha servido de ayuda?
  • No