Una paradoja es una idea extraña opuesta a lo que se considera verdadero o a la opinión general. Es una proposición en apariencia verdadera que conlleva a una contradicción lógica o a una situación que infringe el sentido común. Concretamente en retórica, es una figura literaria que consiste en emplear expresiones o frases que implican contradicción, es decir, en la paradoja se niega lo mismo que se afirma.
¿Qué es la paradoja?
Una paradoja es una figura retórica que consiste en utilizar una afirmación que, a pesar de ser contraria a la lógica o a la intuición, tiene un sentido válido y coherente. Es decir, una paradoja es una afirmación que parece contradictoria, pero que en realidad encierra una verdad profunda y compleja.
Las paradojas pueden aparecer en diversos ámbitos, desde la literatura y la filosofía, hasta la ciencia y la vida cotidiana. Un ejemplo famoso de paradoja es la frase "menos es más", que aparentemente contradice la idea de que la cantidad es importante, pero en realidad defiende la idea de que a veces la simplicidad y la economía son más efectivas y poderosas que la complejidad y el exceso.
Las paradojas pueden ser utilizadas con diferentes fines, como generar reflexión, ironía, humor, sorpresa o desconcierto en el receptor. Algunos ejemplos de paradojas son:
- "Sólo sé que no sé nada", de Sócrates.
- "La vida es el sueño del sueño", de Calderón de la Barca.
- "Siempre miento", de Epiménides.
- "No se puede bañar dos veces en el mismo río", de Heráclito.
- "La única constante es el cambio", de Heráclito.
- "Todos somos iguales, pero algunos son más iguales que otros", de George Orwell en su obra "Rebelión en la granja".
Ejemplos de paradoja
Si quieres paz prepárate para la guerra.
Solo sé que no sé nada
Seamos realistas, pidamos lo imposible
Prohibido prohibir
Es de mala suerte ser supersticioso
Así es mi vida. Cuando al fin tengo lo que quería, sale algo mejor.
Todos somos iguales, pero unos más iguales que otros
Yo no soy supersticioso porque da mala suerte.
Señor gerente, la empresa está trabajando perfectamente bien, tanto, que tengo la impresión de que algo está mal.
Las riquezas transforman en pobres a los ávaros
Gracias a Dios soy ateo
Yo te amo para comenzar a amarte, para recomenzar el infinito y para no dejar de amarte nunca: por eso no te amo todavía.
(Pablo Neruda)
Vivo sin vivir en mí, y tan alta vida espero que muero porque no muero
(Santa Teresa)