Como norma general, todas las palabras acabadas en -mente son adverbios (es decir, palabras que indican el tiempo, el lugar, el modo, la cantidad, una afirmación o una negación). Por lo tanto, si buscas ejemplos de palabras que contengan este sufijo tan característico, irremediablemente tendremos que darte ejemplos de adverbios relativos, de lugar, tiempo, cantidad o modo, por nombrar algunos. Este tipo de palabra suele provenir de otros adverbios, verbos y adjetivos: rápido > rápidamente, afortunado > afortunadamente, feliz > felizmente, frecuente > frecuentemente, por poner algunos ejemplos. Vamos a conocer más ejemplos al respecto.
Ejemplos de adverbios terminados en -mente
Los adverbios tienen el "poder" de constituir el núcleo del sintagma adverbial, así como de actuar como complemento circunstancial del verbo. Es un recurso muy útil para añadir información necesaria a una palabra o frase. Generalmente se constituyen añadiendo el sufijo -mente a los verbos, adjetivos o adverbios.
- Sencillo > Sencillamente
- Fácil > Fácilmente
- Tímido > Tímidamente
- Obvio > Obviamente
- Plácido > Plácidamente
- Ágil > Ágilmente
- Gentil > Gentilmente
- Soberano > Soberanamente
- Ligero > Ligeramente
- Lento > Lentamente
- Elocuente > Elocuentemente
- Educado > Educadamente
- Fiel > Fielmente
- Sagaz > Sagazmente
- Recién > Recientemente
- Constante > Constantemente
- Anterior > Anteriormente
- Actual > Actualmente
Ejemplos de frases que contienen palabras acabadas en -mente
Vamos a conocer ahora algunos ejemplos de oraciones que contienen los adverbios anteriormente mencionados. Así sabrás introducirlos correctamente en una frase.
- ¿Que si he terminado la tarea? ¡Obviamente! No me habría ido a casa si no.
- Se movió ágilmente entre los arbustos. ¡Parecía una gacela!
- El gato de María descansaba plácidamente en el sillón. No quise moverlo de ahí para no despertarlo.
- Resolvió los ejercicios fácilmente; apenas necesitó la calculadora.
- Sencillamente, no sé qué me quieres decir con eso.
- Le besó tímidamente en la comisura de los labios.
- Está felizmente casada.
- Se movía lentamente, como si tuviera miedo de despertar a los demás.
- Afortunadamente no va a volver a suceder. Ya ha aprendido la lección.
- Habla constantemente; es muy complicado concentrarse a su lado.