En la actualidad todos queremos vernos delgados, es más, estar en forma. Para algunos incluso se ha vuelto una obsesión. Por ello, calma, es muy importante cuidar la línea ya que mejorarás tu salud, pero obsesionarse puede llevar al extremo opuesto. Además, también es recomendable preocuparse por cultivar la mente ya que es la verdadera fuente de la felicidad. Estar delgado o una cosa delgada, implica finura, tener poca anchura, en definitiva, algo que no es ni está gordo. Pero no todo lo contrario a delgado es estar gordo, en este post vamos a darte diferentes antónimos de delgado para que sepas diferenciar cada uno de los distintos estados opuestos. ¡Toma nota de estos ejemplos de antónimos, nunca sabes cuándo te harán falta!
8 palabras opuestas a delgado
Si quieres saber cuando utilizar cada antónimo de delgado correctamente, atento a los significados y ejemplos que te damos a continuación.
-Grueso. Hace referencia a algo que tiene más grosor del que debería. “El móvil era tan grueso que no le cabía en el bolsillo”.
-Gordo. Una persona o animal que tiene un mucha grasa en el cuerpo. “Mi perro se está poniendo gordo porque se come todo lo que pilla”.
-Ancho. Cuando algo es más amplio de lo normal. “Mis caderas son de hueso ancho, por eso tengo tantas curvas”.
-Grande. De tamaño desproporcionado a su naturaleza. “Tenía una cabeza tan grande que no le venía ningún sombrero”.
-Obeso. Patología que se caracteriza por retener una cantidad de grasa excesiva. “Si sigues comiendo así de mal vas a acabar con un problema de obesidad”.
-Corpulento. Este antónimo de delgado se utiliza cuando algo tiene mucho cuerpo tanto en altura como en anchura. “Los jugadores de baloncesto son muy corpulentos y especialmente altos”.
-Robusto. Cuando una persona tiene mucho cuerpo y además una gran salud. “El árbol era tan robusto que necesitaron 4 personas para tumbarlo”.
-Voluminoso. Algo que ocupa mucho espacio. “Descubrieron una voluminosa cantidad de drogas escondidas en el barco”.